A menos que no tengamos algo
muy gordo de ver o algún vínculo muy fuerte, no es de recibo meterse en las
guerras de los demás. Lo de meterse con Ucrania, país con quien no tenemos
absolutamente nada de ver, hizo cabrear a los rusos contra quien tampoco
teníamos nada de ver, y perdimos su petróleo, su gas, su turismo, la
importación de sus materias primas y demás bienes de necesidad,….y en
definitiva incluso perdimos un importante cliente para nuestras exportaciones y
para nuestros negocios que nos aportaba beneficios económicos. Hemos ganado más
inflación, más escasez, y más gasto en ayuda militar a Ucrania, y hemos perdido
a un importante cliente que nos venía muy bien económicamente. Y políticamente
también hemos ganado la falta de consideración y posible enemistad de Rusia,
favoreciendo a una Ucrania gobernada por una oligarquía con intereses propios.
Esta actitud ha sido como pegarse un tiro al pie.
Y ahora con meternos con el
conflicto de Oriente Medio ocurre otro tanto en la comunidad internacional, que
quedamos mal tanto para unos como para otros, sean los pro israelíes o los pro
palestinos. Cuando en realidad lo más sensato y beneficioso cuando hay guerras
que no nos incumben es mantener una posición neutral, y acceder solo en lo que
nos pueda beneficiar: atender las demandas de los beligerantes por cuanto
supone de beneficios económicos, hacer de mediadores de paz, etc… Por esto a Suiza, que siempre se mantiene
neutral, todo le sale bien, y encima allí no hay manifestaciones violentas ni
atentados terroristas.
Y no solo esto: abres las
fronteras de España para que entren a diario cientos o miles de gentes de
mentalidades y religiones totalmente intolerantes y deshumanizadoras, y con
ello se te llena el país de delincuentes y potenciales terroristas que se
extienden libremente por toda nuestra patria dispuestos a intimidar, amenazar,
agredir, matar, y robar, con los que además tienes que compartir el paro y los
escasos servicios sociales, con gobiernos pro Agenda 2030 que favorecen a los delincuentes y hacen leyes
injustas, convirtiendo las calles y todos los rincones del país en lugares
inseguros llenos de gentes varipintas que nadie las quiere, y que son
potencialmente peligrosas, agresivas y violentas tanto para atacar como para
robar, y contra las que ni la policía les hace nada ( y encima les temen porque
los políticos ni siquiera dejan defenderse a los propios cuerpos de seguridad).
Con esas hordas descontroladas que nadie quiere, los políticos consienten que
se llene el país, pero que ninguno de ellos los acogería en sus propias casas o
les daría un puesto en sus empresas cuando ni tan siquiera hay trabajo para los
compatriotas nacionales, ni se encuentran viviendas de alquiler donde alojarse
debido a nefastas políticas y leyes que perjudican las garantías y los derechos
de los caseros. A lo sumo, los políticos que nos roban con los impuestos,
aplican una solución muy fácil: les dan unas paguitas para parasitar, que en
muchos casos supera el sueldo medio de cualquier pobre y explotado currante
español.
Y mientras tanto cada vez hay
más españoles en exclusión social por la pobreza y el deterioro social a lo que
nos abocan las políticas de nuestros gobernantes, servicios sanitarios que no
atienden debidamente pese a la magia de los asfixiantes impuestos, colas del
hambre para que te den algo para comer, empresas más endeudadas que al final
cierran dejando su estela de desempleados y familias rotas, empleos precarios y
muy mal pagados, los precios por las nubes que ya ni se llega a final de mes ni
a medianos de mes,……deuda pública que no para de crecer al mismo tiempo que hay
más miseria entre la ciudadanía……..y la inmensa mayoría de los corruptos
políticos que viven y se lucran muy bien de nuestros impuestos, se pasan por el
forro todos los graves problemas que afectan y preocupan a los ciudadanos
españoles, con todas sus implicaciones en costos sociales y económicos.
En definitiva, políticos que
dedican muchas energías y tiempo en meterse con las guerras ajenas y abrir las
puertas a gentes ajenas ( aunque sean de mentalidades intolerantes y
aterradoras, que no comulgan con los valores occidentales de libertad), pero
incapaces de dedicar su atención en resolver los graves problemas internos del
país que nos afectan a todos los ciudadanos.
En resumen, esto es España,
señores, por culpa de políticos irresponsables y sinvergüenzas que los han
votado una inmensa mayoría de españoles. Y a lo que dicen: ¡disfruten de lo votado!.