Lo que abría que llevar en la solapa del traje, es el pin de la bandera de España, para demostrar que se la siente y que se es patriota. ¿Qué presidente del gobierno español la lleva o la ha llevado con orgullo hasta la fecha?. Los presidentes de otros países, acostumbran a llevar el pin de la bandera o escudo de su país, en especial el de Estados Unidos.
La Agenda 2030 no representa ni defiende los intereses nacionales, sino que más bien nos la imponen unos todopoderosos lobbies exteriores, y que encima vulnera nuestras libertades, nuestros derechos, y además de reprimir a los ciudadanos, nos llevan por la senda de la ruina y la pobreza crónicas ( lo que es propio en los dictatoriales regímenes comunistas, en los cuales no existe democracia y todo está sometido a la voluntad del líder de turno).
Lo que es de lamentar, es que el pin de la Agenda 2030 se la ponga incluso el propio Rey de España Felipe VI, cuando debería de lucir orgullosamente el pin de la nación de la cual es el Rey. Con excepción de la monarquía inglesa, parece que el resto de monarquías no se aliena abiertamente con la Agenda 2030. Y luego Su Majestad habitualmente nos suelta con discursos bonitos empleando palabras como “derechos humanos”, “estemos unidos”, “seamos solidarios”, “hagamos sacrificios en beneficio de los españoles”, “tener confianza frente a las adversidades”, “momentos difíciles que superaremos”, “tengamos responsabilidad”, “convivamos en paz”, “fortalecemos el estado de derecho”, “estemos orgullosos de nuestros logros”, “ la Constitución es nuestra garantía”, etc…., pero nunca se va a poner a hablar de bajar impuestos, de los atropellos contra nuestros derechos y libertades, de la corrupción política, de la desmembración territorial del país, de la invasión inmigrante, de la inseguridad por las calles, de las propuestas o soluciones sensatas y razonables contra todo tipo de problemas, de lo mal y las penurias que están sufriendo buena parte de la ciudadanía española, de lo chapucero que funcionan muchos servicios públicos, etc… Porque estos son los temas que más gustaría oír hablar de su Rey a los españoles, considerando que ya cierto monarca definió qué es lo que es ser Rey: “es ser como un padre para su pueblo”. Y el pueblo español necesitaría sentir que su Rey es como parte de su familia, que se preocupa por su bienestar, sus libertades, sus derechos, y su prosperidad.
Por eso, con toda la razón, Santiago Abascal le ha tenido que recordar al presidente Sánchez, que la insignia del roscón de colorines del que tanto presume de llevar en su solapa, lo que representa no es menos autocrático y represivo que lo que simboliza el pin de la hoz y el martillo con fondo de la bandera roja comunista con estrella de cinco puntas, que suele llevar el líder chino ( y que es el dictador de más de 1400 millones de chinos, siendo una parte muy importante de población mundial que vive con miedo e incertidumbre, consecuencia del férreo y autocrático régimen político impuesto).
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